Esta entrada será muy breve por dos razones:
- No soy capaz de escribir más que un párrafo debido a que no tengo palabras para describirlo. Es más, resumiría todo diciendo que Taylor, definitivamente, me ha enamorado.
- No tengo tiempo porque, supuestamente, estoy estudiando.
Como os conté, Taylor Swift dio su primer y único concierto de la gira Speak Now en España. Fue el pasado 19 de Marzo en el Palacio de los Deportes de Madrid.
Obviamente, yo no podía faltar. Así que fui con Bea (no tan fan de Taylor, en un principio) y las dos salimos totalmente conmocionadas. Ella estuvo increíble, tan guapa como siempre, o incluso más. Cantó todas las canciones de su último álbum, el que da nombre a la gira, y alguna suelta de discos anteriores. Es alucinante lo bien que canta en directo; logró emocionarnos a todos, e incluso llegó a emocionarse ella misma al vernos a todos gritando su nombre. Pudo deleitarnos con alguna frase en español como por ejemplo: "Mi español no es muy bueno, pero ¡Me encanta Madrid!".
Para colmo, tras el concierto publicó en su Twitter lo siguiente: "I am in LOVE with the crowd we just played for. Madrid, my heart is yours." Es decir, "Estoy ENAMORADA del público para el que acabamos de tocar. Madrid, mi corazón es tuyo."
Durante el concierto se cambió de ropa tres veces:
- Primero apareció con su clásico look de los conciertos, vestido y botas. Era un vestido cubierto de flecos dorados (oro viejo en la parte superior y brillante en la inferior) y las botas negras de piel.
- Luego desapareció unos instantes, mientras nos deleitaban dos de los guitarristas de su equipo con un solo increíble, y reapareció con un vestido azul klein atado al cuello y con escote recto y fruncido. Los zapatos eran de charol beige, punta redonda y con pasada.
- De nuevo se escondió tras unas cortinas, mientras una compañera tocaba el violín, y reanudó el concierto vestida de largo. El vestido era de escote palabra de honor, de color crudo tirando a grisáceo, con pedrería en la parte superior y gasa en la inferior. La sorpresa fue cuando al comienzo de una canción tiró de la gasa y el vestido se transformó en otro más ceñido y de pedrería, acorde con la parte superior, que llevaba por debajo del largo. Los zapatos eran los mismos que acompañaban al vestido azul.
- Por último, en la reaparición final, cuando cantó Love Story, llevaba un vestido blanco, sencillo, con vuelo y lentejuelas cosidas al azar. Los zapatos, de nuevo los anteriores.
Por supuesto, durante todo el concierto llevaba el número trece pintado en la mano derecha en color azul turquesa, sus rizos rubios bien marcados e hizo su gesto con las manos en forma de corazón.
Abrió el concierto con la canción Sparks fly y lo cerró, aparentemente, con Long live (mi favorita del último álbum). Pero no podía irse sin antes cantar Love Story, así que volvió a salir al escenario y nos dejó boquiabiertos con su actuación y con un sabor de boca inmejorable.
Sin duda, ha sido el mejor concierto al que he ido en toda mi vida; y, no sé por qué, presiento que solo podrá superarlo su próxima visita a España.
Como podréis observar, no he sido capaz de escribir solo un párrafo... Pero bueno... ES LO QUE TIENE EL AMOR...
