10 DÍAS

¡Qué alegría! Por fin han llegado mis vacaciones favoritas: LAS DE NAVIDAD.

No comprendo cómo puede haber gente a la que no le guste la Navidad… Yo soy de la teoría de que aquellas personas que odian este momento tan especial del año, es porque les recuerda a alguien que ya no está en sus vidas por una u otra razón; o bien porque da lugar año tras año a las clásicas broncas familiares.

Madrid, como todos los años, está precioso. Ver el Paseo de la Castellana iluminado una vez más, me da fuerzas para comenzar el nuevo año. El Corte Inglés sigue superándose año tras año (hoy, mientras estaba totalmente parada con el coche en un descomunal atasco pre-navideño, he podido observar la decoración de la fachada principal del Corte Inglés de Castellana. Mi conclusión ha sido que, definitivamente, Isidoro Álvarez quiere superarse a sí mismo en el tema de la decoración navideña) La gente, a excepción de la típica amargada de turno, se vuelve más solidaria,  sonriente y, por supuesto, generosa.

Estas Navidades no van a ser como las anteriores. A pesar de que van a  durar la mitad de lo habitual (puesto que el día 1 de Enero de 2012 pongo rumbo a Aix en Provence), tengo mil cosas que hacer y los días muy pocas horas. Tengo que despedirme de todos y cada uno de mis familiares, amigos y, lo que más me va a costar, de mi novio (algún día os hablaré de él) En total tengo: tres cenas (sin contar con la de Noche Buena y Fin de Año), una merienda-copas con roscón, el concierto de Navidad, alguna que otra comida, un día (mínimo) de compras de regalos del niño Jesús, varias noches de fiesta, un concierto de Label, que hacer maletas y preparar toda la parafernalia de Francia y LA despedida. Todo esto compaginado con hacer una visita o tomar algo con J (sí, la J de los comienzos de mi blog), Sofi, Berta, Las Puchis, Calero, mi primo Toni y sus hermanos (que vieven en Francia), Las Mosquis (Bea y Mar) y B de Boyfriend (lo que me llevará más tiempo).

Mis deseos de estas Navidades son que nieve en Madrid antes de irme y  añadirle 5 horas más a cada día… Me solucionaría tantas cosas… Pero bueno, habrá que apañarse con las clásicas 24 ¿no?

¡FELIZ NAVIDAD A TODOS!