Siempre me siento feliz, ¿Sabes por qué? Porque no espero nada de nadie; esperar siempre duele.
Los problemas no son eternos, siempre tienen solución. Lo único que no se resuelve es la muerte.
La vida es corta, por eso ámala, sé feliz y siempre sonríe; sólo vive intensamente.
Antes de hablar, escucha. Antes de escribir, piensa. Antes de herir, siente. Antes de rendirte, intenta.
Antes de morir, ¡Vive!
William Shakespeare